Las tormentas invernales están a punto de atravesar la mitad oriental de Estados Unidos a un ritmo frenético que podría continuar durante un par de semanas.

La corriente en chorro, esencialmente un río de aire en la atmósfera por el que fluyen las tormentas, está bloqueada en una línea casi perfecta de oeste a este y canalizará tormentas a través del norte de los 48 estados contiguos.

Nuevas tormentas llegarán cada pocos días hasta que la corriente en chorro cambie, algo que podría no suceder hasta la segunda mitad de febrero.